Miami.- El colombiano Donovan Solano ha sido
una de las alternativas que Oswaldo Guillén ha tenido a la mano a la hora de
tapar huecos en el infield y a veces en los jardines de los Marlins de Miami
durante la presente temporada.
El barranquillero se ha ganado la buena estima
del mánager de los peces desde el Spring Training, robando comentarios como “es
el pelotero que más se merece estar en este equipo, por cómo se ha fajado
trabajando”. Sin embargo, comenzó la
temporada en ligas menores debido a que no tenía cupo en el equipo grande.
La espera duró poco y Solano fue llamado a
Miami para quedarse, aprovechando las lesiones y el bajo rendimiento ofensivo
de los Marlins, obteniendo elogios y la recomendación de Guillén para que
juegue la próxima temporada con los Tiburones de La Guaira.
“Yo sé que hay varios equipos que quieren que
él juegue con ellos, pero si Solano no juega con La Guaira que se olvide de
jugar con los Marlins en grandes ligas”, bromeó el mandamás de los peces, a lo
que Solano ha respondido que si es así por las buenas, pues, “jugaré con
Tiburones”.
El elenco salado tuvo gran interés en Solano gracias
a la persistente sugerencia de Guillén, hasta que hace unos días las
aspiraciones de los Tiburones fueron frenadas por los Marlins quienes pusieron trabas que terminaron en la negación
del permiso.
Fuentes del equipo indicaron que los planes
con Solano cambiaron una vez recibida la negativa de Miami, por lo que optaron
por contratar al antesalista C.J. Retherford, quien se desempeña en la sucursal
AA de los Dodgers de Los Ángeles en Chattanooga. “De mantener el interés en
traer a Solano tendremos que hacer ajustes en la importación”, indicó la
fuente.
Esa era la información que se manejaba hasta
el martes 14 de agosto, cuando Guillén comentó antes del segundo juego ante los
Phillies de Philadelphia que “los
Marlins así hacen las cosas, sin embargo ya cambiaron de parecer y están
esperando que La Guaira se comunique con ellos otra vez, ellos van a hablar con
los Marlins y Solano va a jugar en el Caribe, sólo que son pasos que hay que
dar”.
Sobre esto, la gerencia de Tiburones no estaba
al tanto, por lo que habrá que esperar para definir si jugará con La Guaira o
no.
Solano está a la expectativa de saber dónde va
a jugar en el invierno, y ha sido claro en manifestar su interés en hacerlo: “Sólo
sé de los Tiburones por Guillén, se de la liga ya que Jorge Cortés es amigo mío
y me ha contado mucho sobre ir allá… estoy dispuesto a jugar en una liga buena,
pero no sé nada, no me han contactado aún. Espero jugar en Venezuela, somos
países hermanos y es como si estuviese en Colombia, estoy cerca de mi casa y
quisiera ir allá a jugar pelota, esperemos que la gente se acerque para decidir”,
indicó.
Solano, quien debutó en las mayores el mismo
año que su hermano Jhonatan (quien juega con los Nacionales de Washington)
explicó que tiene “el corazón abierto para ir con La Guaira… hasta por twitter
me escriben, me han dicho si estoy listo para bailar samba, y en videos se ve
que la fanaticada es muy buena, me emociona jugar allá, me imagino enseguida
jugando allí”.
El colombiano también está al tanto del
interés de los Tigres del Licey, en la República Dominicana, para que juegue
con ellos, en este caso, probablemente los Marlins tengan la última palabra.
Publicado en El Universal el 20 de agosto de 2012
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